El Hotel-Balneario Pozo de La Salud, en El Hierro, cerrará sus puertas al público a finales del próximo mes de abril durante un periodo de cuatro meses para someterse a obras de mejora en sus instalaciones.
El proyecto, que data de mediados de 2008, ha logrado, al fin, la financiación necesaria para poder ejecutarse, unos 700.000 euros provenientes de la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias, según informa el presidente del Cabildo de El Hierro, Tomás Padrón.
Padrón afirma que las actuaciones que se llevarán a cabo y que afectan tanto al hotel como a su entorno son del todo necesarias para mejorar la calidad del servicio de este emblemático balneario que abrió sus puertas al público en 1996 y en cuyas instalaciones hoteleras se han alojado cerca de 100.000 personas en estos últimos trece años.
“Después de estos años en los que ha estado en servicio, gestionado por la empresa insular de servicios El Meridiano, es momento para adaptar sus infraestructuras e imagen a los tiempos actuales y a unos estándares de calidad cada vez más exigentes”, declara el presidente herreño.
“Este hotel ha permitido –dice- abrir nuevas oportunidades para el sector turístico de la isla y ha sido, sin duda, un apoyo importante para dinamizar la actividad económica del Valle del Golfo en general y del pueblo de Sabinosa en particular”.
Tomás Padrón destaca el hecho de que este Balneario no sólo ha atendido a esas 100.000 personas que se han alojado estos años en su hotel sino que ha ofrecido servicios relacionados con la salud y la estética que se han utilizado por la población local y por los miles de turistas que se han alojado en el resto de la oferta hotelera y extrahotelera de la isla y que no se han querido ir de El Hierro sin disfrutar de las terapias y tratamientos de estética que ofrece el Hotel-Balneario Pozo de La Salud.
AGUAS MINEROMEDICINALES
Tras ese lapsus en el tiempo de cuatro meses, el Cabildo herreño relanzará y potenciará este establecimiento hotelero que se ha beneficiado de la fama de las aguas mineromedicinales del Pozo de La Salud, las primeras aguas minerales canarias que fueron declaradas mineromedicinales en 1843 y de Utilidad Pública por el Estado en 1949.
Unas aguas que se utilizan en el Balneario con gran contenido en minerales y sales, aunque previamente son tratadas para eliminar posibles elementos no aptos para el uso sobre la piel o el consumo humano, tal y
como establece el marco legislativo del RD 865/2003 por el que se establecen los criterios de prevención y control de la legionelosis
En el caso del único balneario canario se utiliza el tratamiento de ultravioleta y de iones. El objetivo es proporcionar agua exenta de contaminación microbiológica sin que pierda sus propiedades mineromedicinales y que en el caso de estas aguas son clorurado-sódicas con abundante magnesio y bicarbonato y la presencia del componente azufrado por lo que están muy indicadas en estados de estrés, artrosis, lumbalgias, eccemas, acné, psoriasis cuando son administradas en forma de balneario y para estreñimiento y digestiones lentas cuando son tomadas por vía hidropónica, tal y como indican los profesores de medicina de las universidades de La Laguna y Complutense de Madrid Navarro, Fernández, Alonso y San Martín en su trabajo de investigación sobre las aguas mineromedicinales del Pozo de La Salud.